En este artículo vamos a intentar aclarar la gran pregunta, esa pregunta que nos hacemos muchas veces: cómo quitar las agujetas. ¿Verdad que tú también te has preguntado eso más de una vez? ¡¡Si nunca te has hecho esa pregunta es porque no eres un verdadero guerrero!!
Es la pregunta del millón, la que todos los deportistas nos hacemos alguna vez en nuestras vidas y no sabemos la respuesta hasta que adquirimos experiencia y al final comprendemos el concepto “agujetas”.
Para saber cómo quitar las agujetas, primero hay que saber qué es este molesto dolor que nos acompaña en nuestras vidas, quizá demasiado a menudo (más adelante veremos por qué).
¿Qué son las agujetas?
Las odiosas agujetas (mialgia diferida) son el nombre que se le ha puesto a un tipo de dolor muscular conocido como dolor muscular de aparición tardía (DOMS por sus siglas en inglés).
Seguro que ya lo sabes, pero las agujetas (DOMS) son ese molesto e irritante dolor que aparece normalmente el día después de realizar un entrenamiento duro e intenso. Aparecen el día después pero su punto más alto de dolor aparece a las 48-72 horas aproximadamente (2-3 días), y durante esos días se puede llegar a pasar realmente mal.
Pero seguro que además de preguntarte cómo quitar las agujetas, también te preguntas por qué aparecen, ¿verdad? Son como el uno y el dos, una pregunta te lleva a la otra. Veamos por qué aparecen estas quisquillosas amiguitas.
¿Por qué aparecen las agujetas?
Las agujetas suelen aparecer como he dicho, generalmente el día después de un entrenamiento de los buenos, un entrenamiento de los que hacen historia, duro e intenso. Uno de los mitos que rodea este tema es que las agujetas solo las padecen los principiantes o gente que hace mucho tiempo que no entrena o hace ejercicio, pero eso no es del todo cierto.
Yo personalmente llevo muchos años entrenando con pesas y a día de hoy todavía recibo la visita de las agujetas muy a menudo, me atrevería a decir que casi semanalmente.. Siempre que te superas a ti mismo y sometes al cuerpo a esfuerzos estratosféricos aparecen las agujetas, como por ejemplo con un buen entrenamiento de pierna.
Un entrenamiento de pierna es diferente al resto de entrenamiento de otros grupos musculares, la pierna es el músculo más grande del cuerpo y para entrenarlo y que se note que la hemos entrenado, hemos de hacerlo muy en serio. Siempre hay que tratar de superar las marcas personales, y siempre que lo hagas seguramente tendrás agujetas al día siguiente.
¿Quién no ha sufrido las tan comunes agujetas el día después de hacer pierna? Ese momento en el que vas a sentarte en el WC y literalmente no puedes. O cuando te vas a sentar en una silla y te cuesta la vida entera hacerlo pero al final lo consigues y piensas: bien, ya me he sentado, pero cuando te tienes que levantar de la silla vuelve la pesadilla… no se si cuesta más sentarse o levantarse..
Sí, seguro que sabéis de lo que hablo y a vosotros también os ha pasado… Seguramente muchos las estaréis padeciendo ahora mismo y os compadezco amigos/as, de verdad que si, es eso que dices: no se lo deseo a nadie, bueno, quizá a alguien sí.
Es más común que las agujetas aparezcan cuando eres principiante o llevas mucho tiempo de inactividad física, ya que los músculos están en un estado de letargo o en el caso de los principiantes, nunca se han visto expuestos al ejercicio físico.
Ejemplo común de agujetas
Pongamos el ejemplo de un principiante que va al gimnasio en su primer día a hacer pesas. Esta persona llega al gimnasio con ganas de comerse el mundo y de conseguir el cuerpo que tanto tiempo ha estado soñando en cuestión de cuatro días, así que llega a la sala y se va directo al banco de press banca a ver cuanto levanta. ¿Os suena esto que estoy diciendo chicos?
Este chico principiante prueba a hacer unas repeticiones tan solo con la barra y piensa: “esto pesa muy poco, me voy a poner cinco kilos a cada lado”. Se los pone y ve que va sobrado y se pone cinco kilos más a cada lado y así hasta que le cuesta mucho hacer el ejercicio y llega al fallo muscular (algo que ha leído por internet que te pone muy fuerte).
¿Qué pasa? Que hará unos cuantos ejercicios típicos de primer día de gym a tope de peso, press banca, jalones al pecho, curl de bíceps con barra, extensión de tríceps en polea alta con cuerda y, quizá un curl martillo delante del espejo para venirse arriba.
Seguramente, al día siguiente no podrá ni levantarse de la cama del dolor que tendrá en todo su cuerpo, bueno, en el tronco superior claro, y pensará: “jolines, si lo llego a saber no me hubiese pasado tanto con el peso.” No te preocupes amigo, es típico de principiante y por ahí hemos pasado todos, y quién diga que no, ¡miente! Por cierto, aquí os dejo unos prácticos consejos para principiantes con los que evitaréis este tipo de problemas.
Esto pasa porque los músculos de este chico no estaban preparados para ese tipo de movimientos a esa intensidad y mucho menos para mover esos pesos, por lo tanto las fibras musculares que forman los músculos se rompen por muchos sitios creando microroturas musculares que causan inflamaciones musculares con la consecuencia de las agujetas.
En ese momento te preguntas cómo quitar las agujetas y tiras de Google para buscar remedios contra las agujetas y ver qué se cuenta la gente, y lo primero que ves es el mito más mitificado de todos, ¡¡el agua con azúcar!!
Pero este es un mito con base científica (hablo con retórica), y es que hace años se creía que las agujetas eran causadas por unos microcristales que se formaban por la liberación de ácido láctico tras un entrenamiento y el agua con azúcar deshacía esos cristalitos.
Con el tiempo se confirmó que eso no era cierto y se ha investigado mucho acerca de cómo quitar las agujetas, por suerte para nosotros, así que ya sabes que el agua con azúcar no sirve para quitar las agujetas.
Pero entonces, seguimos con la duda de cómo quitar las agujetas. ¿Cómo hacer que desaparezcan esos molestos pinchazos que parecen agujas clavadas en nuestros músculos? De ahí el nombre agujetas, porque parecen agujas diminutas clavándose en nuestro tejido muscular. Veamos cómo podemos deshacernos de ellas, si es que podemos claro…
Cómo quitar las agujetas
Siento ser yo el que te lo diga, el que te lo comunique, el que te de la mala noticia, pero las agujetas no se pueden quitar así como así… Sí que se puede acelerar un poco el proceso para que vayan desapareciendo más rápido, pero no podemos tomarnos una pastilla mágica para que desaparezcan a los diez minutos.
Remedios contra las agujetas
Mi primera recomendación es que no dejes de hacer ejercicio por el simple hecho de tener agujetas, ya que la mejor forma de acabar con ellas es haciendo ejercicio a una intensidad más baja para mejorar la circulación de la sangre, la cual transportará los nutrientes que necesitan los músculos para repararse de forma óptima.
Toma suficiente proteína para que los músculos dañados tengan el suficiente “pegamento” para arreglarse y estar a punto para el próximo entrenamiento, y toma también aminoácidos ramificados (BCAA) para reforzar las proteínas y acelerar la recuperación.
Como ya sabes, un batido de proteínas es la mejor opción para tomar después de un duro entrenamiento. Prueba nuestras nuevas THE Whey y el THE Amino Boost de Myprotein, estos dos suplementos juntos forman una bomba reparadora para los músculos que acelerarán y optimizarán la recuperación post entreno de forma considerable.
Si no sabes muy bien cómo tomar las proteínas y los BCAA, te dejo unos artículos en donde se explica a full todo sobre estos impresionantes suplementos:
Conclusión
Si quieres saber cómo quitar las agujetas, lo primero que debes hacer es tomarte los entrenos con calma si eres principiante, y si no eres principiante pero llevas un tiempo inactivo, no empieces con la misma intensidad que cuando lo dejaste. Eso solo te producirá las molestas agujetas que te quitarán las ganas de volver a entrenar al día siguiente, mermando tu nuevo intento de retomar la rutina de entrenamientos diarios.
No tengas prisa por ponerte fuerte en dos días y ve al gym con calma, recuerda que las cosas buenas se hacen esperar y tú eres una de esas cosas buenas.