En este nuevo capÃtulo de “Ciencia o ciencia ficción”, vamos a profundizar un poco más en otra de las tendencias del mundo de las dietas, que no es otra que la dieta frugÃvora o dieta frutariana, una dieta que, como su nombre indica, implica comer mucha fruta.
A continuación, analizaremos un poco más a fondo esta dieta y veremos si realmente nos beneficia en algo o simplemente es otra dieta de moda que se suma a la ya interminable lista de modas.
¿Qué es el frugivorismo?
Se puede ser frugÃvoro por varios motivos. Por ejemplo, hay quien sigue la dieta frugÃvora para revivir la época en la que los seres humanos éramos simplemente recolectores. Otro de los motivos comunes para seguir esta dieta es eliminar la toxicidad del cuerpo. También hay personas que siguen esta dieta por el reto que supone su naturaleza restrictiva.¹
Para ser frugÃvoro, al menos la mitad de las calorÃas deben proceder de fruta cruda. Normalmente, el otro 25% o 50% de las calorÃas proceden de frutos secos, semillas, verduras y cereales integrales. Pero un frugÃvoro estricto puede comer hasta un 90% de fruta y sólo un 10% de frutos secos y semillas.¹ Esta dieta es muy restrictiva por naturaleza.
Estos son los alimentos que un frugÃvoro puede comer:
- Frutas ácidas: cÃtricos, arándanos, piña
- Frutas semiácidas: cerezas, frambuesas, higos
- Frutas dulces: uvas, melón, plátanos
- Frutas aceitosas: coco, aceitunas, aguacate
- Vegetales: pimientos, tomates, pepinos, calabaza
- Frutos secos: avellanas, anacardos, almendras, pistachos, nueces
- Semillas: girasol, calabaza
- Bebidas: agua de coco, zumos de fruta fresca y agua
Alimentos prohibidos
Una persona frugÃvora no consume ninguna proteÃna animal, como las aves de corral, el cerdo, la ternera y los huevos. Al igual que la proteÃna animal, los productos lácteos no están permitidos en la dieta frutariana, quedando excluidos alimentos como la leche, el yogur, el queso o cualquier otro producto lácteo de origen animal. Algunos frutarianos toman leche de almendras, anacardos o coco en lugar de leche de vaca o de cabra.
Los granos y productos de granos no están permitidos en la dieta frugÃvora, y esto incluye los productos de granos germinados. La patata tampoco está permitida, ya que tiene almidón. Tampoco incluirÃa ningún tipo de legumbres, como alubias, garbanzos, lentejas, guisantes, soja y cacahuetes. Los alimentos procesados tampoco están permitidos en esta dieta, por lo que un frugÃvoro podrÃa hacer la compra semanal perfectamente en una fruterÃa.
Lo que dice la ciencia
A pesar de la evidente calidad nutricional de las frutas enteras, comerlas en sustitución de otros grupos de alimentos puede ser peligroso.
Nuestro cuerpo necesita proteÃnas y grasas, dos macronutrientes principales que quizá no se consuman en suficientes cantidades en esta dieta. Además, suprimir la ingesta de cereales supone un riesgo de carencia de vitamina B, restringir los lácteos y las verduras puede suponer un riesgo de carencia de calcio, y no comer productos de origen animal puede suponer una carencia de vitamina B-12. Las deficiencias de micronutrientes pueden provocar complicaciones como anemia, fatiga, trastornos inmunológicos y osteoporosis. Un frugÃvoro suele tener también niveles bajos de vitamina D, yodo y ácidos grasos omega-3, lo que puede provocar anemia, cansancio, letargo y disfunción del sistema inmunitario. Todo esto hace que la desnutrición y las carencias nutricionales sean muy comunes en una dieta frugÃvora.
Riesgo de complicaciones de salud
El riesgo de complicaciones de salud en una dieta frugÃvora es alto. La naturaleza restrictiva de la dieta puede ser peligrosa para las personas con diabetes o prediabetes, ya que el consumo de grandes cantidades de fruta puede aumentar el nivel de azúcar en sangre y afectar a la sensibilidad a la insulina. Una dieta basada exclusivamente en la ingesta de fruta también puede ser peligrosa para las personas con trastornos pancreáticos y renales. En algunos casos, los frugÃvoros estrictos pueden llegar a pasar hambre accidentalmente y caer en una cetoacidosis grave.
Restringir la alimentación a solo un grupo de alimentos (frutas) puede dar lugar a la ingesta masiva de otros grupos de alimentos debido a lo que se conoce como el ciclo de la dieta. También puede dar lugar a desórdenes alimenticios, ya que es una forma bastante radical de alimentarse.
Puesto que un frugÃvoro se alimenta principalmente de las frutas y se priva de las vitaminas, grasas y proteÃnas necesarias, puede estar empujando al cuerpo a lo que se conoce como “modo de inanición”. Si el cuerpo siente que no está cubriendo sus necesidades energéticas, ralentizará el metabolismo en un intento de conservar energÃa para funciones vitales como la respiración.
El veredicto
Si bien la dieta frugÃvora tiene algunos beneficios nutricionales, también tiene serios inconvenientes. Como las frutas suelen ser bajas en grasa y tienen mucha agua, se puede comer mucha fruta con un aporte relativamente bajo de calorÃas. Alimentándote solo a base de fruta, tendrÃas que comer un gran volumen de alimentos en cada comida para satisfacer tus necesidades calóricas y también para saciar tu apetito.
Aunque las frutas contienen muchos nutrientes, no contienen todos los necesarios para una dieta sana y equilibrada. Alimentarse solo de fruta también puede aumentar (y mucho) la aparición de antojos de otros alimentos, lo que puede provocar atracones y, de nuevo, desórdenes alimenticios.
Nuestro veredicto es que la dieta frugÃvora es otra moda pasajera más de las muchas modas temporales que azotan la actualidad. Lo mejor y más recomendable es centrarse en seguir una dieta saludable y variada rica en alimentos integrales que no elimine ningún grupo de alimentos enteros, ya que si no se hace correctamente, eso podrÃa suponer el riesgo de sufrir deficiencias nutricionales importantes.